Ellis considera que, debido a esquemas mentales erróneos, sufrimos lo que él llama Creencias Irracionales.
Comentábamos que nuestros sentimientos dolorosos no proceden de los acontecimientos sino de la interpretación que hacemos de ellos. Por eso mismo, si ponemos en tela de juicio esos pensamientos que nos generan dolor y los sustituimos por nuevos esquemas de pensamiento cambiaremos nuestros sentimientos. Seremos en definitiva más racionales, más eficaces, más realistas.
Analizaremos todas las Creencias Irracionales que nos señala. Empezamos por las 5 primeras:
1. Debo ser querido y aprobado por todas las personas. Es terrible si no lo soy.
Ser aceptado por todas las personas es imposible. Por una parte porque no podemos ser del agrado de todo el mundo y por otro lado porque es imposible ser siempre impecable y agradable. Además si necesito satisfacer mi necesidad de aprobación por todos los demás, sería imposible que pudiera ocuparme de mis propias necesidades y tendría que renunciar a mis intereses.
Las alternativas racionales son:
- Me duele que algunas personas importantes para mí no me aprueben en determinadas cosas, pero prefiero ser fiel a mis intereses.
- Es frustrante pero lo puedo soportar.
- Más frustrante y doloroso sería no poder vivir de acuerdo con mis principios o necesidades y además no obtener su aprobación no significa que no me quieran.
2. Cuando alguien se porta mal o injustamente debe ser castigado. Es una persona mala e indigna.
Las personas somos diferentes y además en ocasiones podemos actuar de manera que hagamos daño sin pretenderlo ni ser conscientes. Culpabilizar a los demás nos genera ira y hostilidad lo que favorece el conflicto con los demás y con nosotros mismos.
Si nos culpabilizamos por nuestra conducta estaremos generándonos culpa.
Racionalmente podemos pensar que no somos jueces para evaluar las conductas ajenas, ni tenemos la obligación de dar un escarmiento para que aprendan a comportarse de manera adecuada.
Si alguien crítica mi conducta puedo revisar si este acto está mal y corregir, o por el contrario pensar que aunque tengan sus motivos para opinar así, no es de mi incumbencia.
3. Es terrible que las cosas no salgan como queremos.
Pretender que las cosas nos vayan siempre como deseamos es natural pero poco realista. Es importante darnos cuenta que es imposible alcanzar tal objetivo. Así, aunque nos frustre que la vida no nos sea del todo a favor, no es ni una catástrofe ni nada terrible.
Es más realista pensar:
- Que es normal que a veces la vida nos lleve la contraria.
- Ver si lo puedo cambiar.
- Si no es así, lo mejor es aceptarlo y analizar de qué manera puedo seguir viviendo con gusto por mi vida.
4. Está justificado que esté nervioso por los acontecimientos inciertos y potencialmente peligrosos.
Anticipar el futuro favorece que proyectemos nuestros miedos, pero la ansiedad que nos genera esto nos impediría ser eficaces a la hora de afrontarlo si realmente llegara a suceder. Nos conviene pensar que la mayoría de los hechos temidos son menos preocupantes y menos catastróficos cuando ocurren de verdad y anticiparlos en nuestra imaginación genera más dolor que la propia situación temida.
Racionalmente, hay que pensar:
- Temer ciertos acontecimientos no hace que los podamos evitar.
- Preocuparnos (PRE-ocuparnos) es eficaz si podemos actuar sobre algo, pero es absurdo si no podemos hacer nada al respecto.
5. No valgo para nada si no soy totalmente competente y con éxito siempre o la mayoría de las veces y en todas las áreas que me interesan.
Poner nuestro valor en la consecución del objetivos es tan inestable que nos hace pensar que valgo, si lo consigo, y no valgo, si no lo consigo. A veces el objetivo no depende sólo de nosotros y es natural fracasar en alguna tarea. Nuestro valor se encuentra en cómo nos enfrentamos a ella.
Si hago las cosas lo mejor que se y lo mejor que puedo hacerlas en el momento que las estoy haciendo poniendo en ello lo mejor de mi, ya estoy expresando todo mi valor puesto que no podría hacerlo mejor aquí y ahora.
Tal vez en otro momento, en otras circunstancias, con otra experiencia, con más tiempo podría hacerlo mejor, pero no ahora. Cometer errores en natural pero horrorizarme por ello me impide aprender y mejorar.
En nuevos artículos iremos analizando otras Creencias Irracionales…
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